Los establecimientos de Alimentos y Bebidas, bien sea un pequeño establecimiento familiar, o un hotel de convenciones de gran tamaño, tienen características comunes:
Todas sus actividades son complejas y se realizan bajo intensa presión, con tareas que hay que resolver simultaneamente. Los problemas con el personal son frecuentes y siempre existen riesgos de pérdidas operacionales sino se aplican los controles adecuados. Los factores externos, como la inflación, escasez de productos e ingredientes, además de regulaciones gubernamentales, resaltan la complejidad de este tipo de actividad…
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